El fin del concurso fue generar organización política desde el aporte a la cultura popular, transitando esquemas de organización en función de la construcción de un mural colectivo con la comunidad del barrio.
Este concurso se viene articulando desde hace 2 años, en donde se realizaron capacitaciones sobre muralismo y arte público en los distintos territorios en donde se inscribieron los diferentes grupos. Luego de realizarse la capacitación en donde se realizaba un mural en alguna institución, se les entregó un kit de pinturas a los participantes para que pudieran replicar la experiencia en sus barrios convocando a la participación de todos los vecinos y militantes de la zona.
El saldo organizativo y productivo para nuestra fuerza es altamente positivo ya que se realizaron hasta el momento 5 murales en la Ciudad de Buenos Aires, de los cuales 2 fueron mencionados y premiados. Esta política de trabajo permitió a nuestro espacio y a tantos otros empezar a articular la vinculación con los sectores populares de la cultura realizando murales y jornadas participativas y dejando capacidad instalada y un sentido en la construcción de lo cultural en cada territorio. Este programa nos permitió crecer y desarrollarnos además de empezar a cristalizar una política especifica que se articula en los sectores más golpeados de nuestra sociedad.
Todas las temáticas de los murales fueron discutidas desde el conjunto y la participación de los compañeros y de los vecinos fue óptima.
En el acto realizado el miércoles 7 se premiaron además a otras organizaciones del campo popular que conciben a los murales y la cultura popular como una herramienta de construcción política desde el conjunto, además de ser este acto, un punto de encuentro entre militantes, vecinos y funcionarios del ministerio de desarrollo social.
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